(tortilla española)
La tortilla de
papas o mejor conocida como tortilla española, ya que es muy típica de ese
país, es realmente exquisita, no tiene ingredientes sofisticados a menos que
ud. así lo quiera, sin embargo, complace a cualquier paladar exigente.
Básicamente la
tortilla de papas se compone de papas, cebollas y huevos. Pero, si es de
su agrado colocarle otros ingredientes puede hacerlo, dándole un toque personal
y sabores adicionales.
Como siempre
compre ingredientes de buena calidad para obtener óptimos resultados. A
las papas quíteles cualquier pequeño defecto que tenga, como los tan conocidos
“ojos” de las papas o cualquier otra imperfección. Lo mismo para la
cebolla, como para cualquier ingrediente utilizado. Juegue con los
colores de los alimentos. Por ejemplo, en esta tortilla pondré pimentones
muy rojos, para que le hagan contraste a lo claro de las papas y cebollas.
También es
imprescindible tener un buen sartén que tenga un excelente revestimiento
antiadherente para que sea fácil voltear la tortilla sin que se corra el riesgo
que se pegue y se desmorone en la volteada.
Esta tortilla se
puede comer estando fría o caliente. Puede servir como acompañante de un
trozo de carne o puede servirse sola como un exqusito pasapalo.
Ingredientes
1 Kg. de papas
blancas
½ kg. de cebollas
50 a 100 grs.
tocineta picada finita
1 ó 2 pimentones
rojos en tiritas
6 a 8 huevos
Opcional
Perejil
Queso parmesano
rallado
Sal al
gusto
Cambiar tocineta
por chorizo español
Abundante aceite
para freír
Preparación
Antes de
comenzar a realizar la tortilla, preparo todos los ingredientes a
emplear. Las papas las lavo muy
bien, las pelo y las voy a cortar de la siguiente forma: parto por la mitad a lo largo, y estas mitades a su
vez las vuelvo a partir por la mitad, quedando
4 porciones de papas. Ahora rebano estos cuartos en tajaditas delgadas
pero no transparentes, aprox. 3 mm. Coloco estas papas en un bol donde
quepan todos los ingredientes.
Las cebollas las pelo, lavo y corto estilo juliana, es decir, en tiritas.
Ahora junto con las papas en el mismo bol.
Añado algo de sal, y revuelvo muy bien
para que las papas con las cebollas se mezclen. Añado suficiente sal,
pero, en todo caso es preferible que le falte sal a que le sobre sal, ya que
cuando vaya a añadir los huevos ahí corrijo el punto de sal. Es más fácil
añadir que quitar. Aparte pongo a calentar un sartén grande con suficiente aceite para que el contenido del
bol quede cubierto por el mismo. Cuando ya esté bien caliente el aceite
introduzco las papas y las cebollas, para que no se queme la parte que queda en
contacto con el fondo del molde bajo la llama a la mitad.
Mientras espero 10 minutos, preparo los pimentones, los cuales los debe cortar
en tiritas delgadas, es mejor que las tiras no sean excesivamente largas para
que le sea fácil a la hora de cortar las tortillas. Cada tira de
pimentón, la corto en 2 ó 3 pequeñas tiras, más o menos de un largo de 3
cms. Cuando hayan transcurrido los 10 minutos desde que empezó a freírse
las papas y cebollas, introduzco los
pimentones en el sartén, revolviendo para que queden mezclados todos los
ingredientes. Mientras se
fríen las papas, las cebollas y el pimentón, pico pequeñito la tocineta, y bato
ligeramente los huevos. Pruebo
si está blanda la papa, de paso saboreo el punto de sal, si le falta o
no. Si no le falta sal, al huevo sólo adiciono de sal lo necesario para
él, si las papas están faltas de sal, al
huevo le añadiré más sal de lo correspondiente para él. Si llegara
a pasar que las papas las siento saladas, no le coloco sal al huevo.
Ahora, lo del sartén lo retiro con un
cucharón de huequito para escurrir el exceso de aceite. Coloco las papas, las cebollas y el pimentón en un
bol, espero que se haya enfriado un poco
y añado el huevo, la tocineta y si voy a agregar algún ingrediente
adicional. Revuelvo para mezclar. El sartén que voy a utilizar, se calienta un poco, le agrego un
poquito de aceite y cuando éste esté caliente, baño todo el fondo y las paredes
con el aceite, ahora vacío la preparación anterior y la emparejo. Ahora
disminuyo el calor a la mitad, para que se cocine y no se queme. Se dejó
cocinar hasta que se vea prácticamente cocinado el huevo (que no se vea tan
líquido para poder voltear) y lo volteo con ayuda de un plato llano, que tenga
un diámetro mayor al del sartén. Para que el contenido del sartén no se
pegue al plato, hay un secreto muy fácil, que es mojar el plato, escurrir el
agua y así deslizarán todos los ingredientes. Si por alguna razón, en el
sartén quedan algunas partículas de la tortilla, las retiro antes de colocar la
tortilla a cocinar por el otro. Ahora con ayuda del plato, deslizo la tortilla ayudándome con una cuchara. Le
doy forma redondeada por los bordes para
que tenga un lindo acabado, esto se hace con el revés de la cuchara, empujando
un poco la orilla hacia el fondo del sartén. Además para que se cocine
uniformemente en su interior, debo pinchar la tortilla con un tenedor,
suavemente para no romperla, esto hará que los vapores de la cocción pasen por
la tortilla, cocinándola sin abombarla. Se deja cocinar por unos minutos
más por el otro lado. Cuando
la tortilla está lista, la volteo en el plato de presentación. Para
servir como pasapalos, espero a que se enfríe un poco, y pueda cortar en cuadrados
la tortilla, para que le sea más fácil tomar una ración.
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